El almacenamiento de energía de una batería se puede dividir en tres secciones conocidas como: energía disponible, que se puede recuperar instantáneamente; la zona vacía, que se puede rellenar y; la parte inutilizable, que se ha vuelto inactiva como consecuencia del envejecimiento.
A medida que la parte inutilizable va aumentando, el tiempo de carga del vehículo eléctrico se acorta porque hay menos para llenar. Los tiempos de carga más rápidos en baterías se notan especialmente con baterías de níquel y en parte también con ácido de plomo, pero no con iones de litio.
En la mayoría de los casos, la disminución de la capacidad de la batería es lineal y se debe al número de ciclos de carga y de la antigüedad. Una descarga completa empeora la salud de tu batería más que una descarga parcial. Por lo tanto, es mejor no descargarla por completo, sino cargarla más a menudo. Sólo se recomienda una descarga completa periódica en baterías níquel con el fin de controlar la memoria y la baterías inteligente como parte de la calibración. Las baterías de litio y níquel ofrecen entre 300 y 500 ciclos completos de descarga y carga antes de que la capacidad caiga por debajo del 80%.
Los expertos aconsejan remplazar la batería cuando la capacidad de esta cae más del 80%. Si embargo, el umbral de vida útil puede variar según la aplicación y las preferencias del usuario. Es por esto que se recomienda analizar la capacidad de la batería cada 3 meses.
Por otro lado, las condiciones climatológicas, la sulfatación y la corrosión de la rejilla son las principales causas de la muerte de las baterías de plomo ácido. La sulfatación es una capa delgada que se forma en la placa de la celda negativa que hace que la batería permanezca en un estado de carga bajo. Si se detecta a tiempo, una carga de compensación puede revertir la condición. La corrosión de la rejilla se puede reducir con una carga cuidadosa y la optimización de la carga flotante.
En las baterías a base de níquel, el deterioro de la batería suele deberse a la formación de cristales en ella. Un ciclo completo de descarga y carga podría restaurar la batería al servicio completo ya que una descarga completa periódica mientras la batería está en servicio mantiene la cristalización bajo control y evita daños al separador.
Por último, en relación al proceso de envejecimiento de los iones de litio, es un proceso que ocurre naturalmente como parte del uso y el envejecimiento, y aún no se puede revertir.